Sant Jaume de Frontanyà. Comarca del Berguedà. Provincia de Barcelona.
El edificio es un excelente ejemplar arquitectónico del románico catalán del siglo XI de un claro estilo lombardo Destaca la simplicidad de la construcción la esbeltez de proporciones y su austera decoración, que le dan una gran personalidad.
Fue un primitivo monasterio agustiniano (1070) del cual solo queda la iglesia de una sola nave, tres ábsides y transepto. La nave y los brazos del transepto tienen bóveda de cañón, sobre el crucero hay una cúpula ochavada, que forma un cimborrio en el exterior de doce caras, único de este periodo en Cataluña. En el ábside central hay cinco hornacinas semicirculares separadas por semicolumnas.
En el exterior la fachada presenta una ventana en forma de ojo de buey, sobre la puerta de entrada formada por dos arcos de medio punto en degradación.
Los ábsides tienen una decoración de tres series de cinco arcuaciones separadas por lesenas en el central y frisos de arcuaciones en los laterales. En el cimborrio también se encuentra un friso con arcuaciones.
El campanario cuadrado, es del siglo XVI, colocado sobre la fachada principal.