De estilos gótico y románico, la iglesia de San Pedro de la
Rúa, es la iglesia mayor de Estella-Lizarra, y su claustro del siglo XII, está
considerado uno de los conjuntos de mayor riqueza escultórica del románico
navarro.
Encaramado en un alto desde el que domina la ciudad, este
templo nos muestra también un bello pórtico del siglo XIII, de arcos lobulados
de influencia árabe y rica ornamentación, una imponente torre, y un interior
que alberga entre otros, la sillería romanesca del coro y diversas esculturas
románicas y góticas de interés.
El claustro, fechado en torno a 1170, es uno de los
elementos más bellos del conjunto. Sólo conserva las galerías norte y oeste. De planta cuadrada, pertenece a un románico
tardío y decorativo que combina la iconografía del Camino de Santiago con otros
temas vegetales y animales.
Contiene sencillas arquerías de medio punto, nueve por
banda, apoyadas en parejas de columnas. Así, en los capiteles del ala norte se
representan escenas de santos y de la vida de Cristo, mientras que en los de la
crujía oeste se esculpieron motivos vegetales y seres fantásticos como arpías y
variaciones sobre águilas. Y no pase por alto un capricho excepcional de esta
última crujía, que se repite en Burgo de Osma y Santo Domingo de Silos: las
cuatro columnas torsas entrelazadas en las que se apoya la arquería central.
Otro valioso elemento de este templo es su pórtico románico
de finales del siglo XII, que cuenta con una serie de arcos lobulados de
influencia árabe y exhibe una rica ornamentación.