Iglesia de San Cipriano (Bolmir, Cantabria)

La Iglesia de San Cipriano está situada en la pequeña localidad de Bolmir en las cercanías de Reinosa, en Cantabria.
La iglesia sigue con una clara similitud la línea de la Colegiata de San Pedro de Cervatos, situada a escasos kilómetros, si bien el tamaño es más pequeño y la decoración más modesta. Data también de finales del siglo XII. Presenta una nave única a la cual se le añadieron posteriormente capillas laterales adosadas al presbiterio. La espadaña exenta debe datar también de la misma época.

Al igual que en Cervatos, abundan canecillos de temática sexual, donde se muestran hombres y mujeres en posturas obscenas.

Santa María de Retortillo (Retortillo, Cantabria)

 

Santa María de Retortillo es la iglesia parroquial del pueblo de Retortillo situado a cuatro kilómetros al este de Reinosa, en Cantabria. La iglesia se asienta sobre las ruinas de la antigua ciudad romana de Julióbriga y su construcción es de finales del siglo XII y apenas ha variado su trazado original. El templo es un hermoso ejemplo del románico pleno. Edificado de una sola nave orientada y rematada al este por cilindro absidal. En fecha tardía se le añadió capilla lateral adosada al presbiterio sur y una impresionante escalinata de piedra para acceder a la espadaña.

Colegiata de San Pedro (Cervatos, Cantabria)

La Colegiata de San Pedro de Cervatos, se sitúa en el extremo sur de Cantabria, en plena comarca del Alto Campoo, a unos cinco kilómetros al sur de Reinosa. La iglesia se estructura en una sola nave que desemboca en un ábside semicircular estructurado al exterior en tres paños mediante contrafuertes que, a mitad del muro y a la altura de la línea de imposta, se convierten en elegantes semicolumnas rematadas en capiteles ya al nivel de la cornisa.

Tiene una muy bella portada ligeramente adelantada respecto al muro y protegida por un breve tejado.
A los pies del templo y desviada respecto al eje se yergue una imponente torre campanario, cuya estructura, de planta ligeramente rectangular, se eleva en tres registros; un primero ciego de gran empaque, y otros dos de campanas cuyos vanos acusan un ligero apuntamiento que delata una cronología algo más tardía que el resto, probablemente entre los últimos años del siglo XII y las primeras décadas del XIII.
Este templo tiene una buena cantidad de canecillos basados en escenas de carácter erótico y pecaminoso, lo que han hecho que éste edificio haya sido conocido popularmente como "la catedral del románico erótico español".

Iglesia de San Facundo y San Primitivo (Silió, Cantabria)

La iglesia de San Facundo y San Primitivo es un templo situado en la localidad de Silió, en Cantabria. Construido en la primera mitad del  siglo XII, destaca sobre todo en él la talla de capiteles y canecillos, de gran calidad.
Se trata de una iglesia de una sola nave. La entrada principal se encuentra en el muro sur. Esta portada se encuentra adelantada con respecto al muro. Tiene forma de arco de medio punto, abocinada con arquivoltas que avanzan destacándose del muro. Por encima tiene un tejadillo con canecillos en los que abundan los de temática animal. De su exterior lo más destacado es el ábside semicircular.

Colegiata de Santa Juliana (Santillana del Mar, Cantabria)

La colegiata de Santa Juliana de Santillana del Mar, es uno de los monumentos románicos más representativos de la región.
El templo primitivo fue sustituido en época románica por el que se ha conservado hasta hoy, que data del siglo XII. En sus orígenes constituyó un monasterio benedictino, pero en el siglo XI adquirió el rango de Colegiata regida por una comunidad de canónigos de San Agustín. El esquema constructivo responde al de una iglesia de tres naves de cuatro tramos y transepto, tres ábsides semicirculares, una torre cilíndrica, y cimborrio sobre el crucero. Un elemento de especial interés lo constituye el claustro adosado a finales del siglo XII y principios del XIII al muro norte de la iglesia.